i-public@
reflexiones sobre administración pública inteligente

miércoles, 27 de agosto de 2008

Trámites difíciles de comprender


Sé que desde la Dirección General de Tráfico se está trabajando intensamente por mejorar los servicios públicos que prestan a ciudadanos a través de la incorporación de la tecnología. Así me lo han transmitido colegas que están dedicados a estos menesteres. Además, entre las 70 medidas que comentábamos ayer aprobadas para reducir las cargas administrativas existen unas cuantas dentro del ámbito de actuación de la DGT. En concreto,

37. Proyecto INTEVE ("Informes Telemáticos de Vehículos"), que ofrece la posibilidad de obtener informes del Registro de Vehículos a través de Internet. Segundo semestre de 2008.
38. Posibilidad de llevar a cabo la transferencia telemática de vehículos a través de centros gestores. Durante el año 2009.
39. Posibilidad de que los Centros de Reconocimiento de Conductores remitan telemáticamente a la Dirección General de Tráfico la certificación médica exigida a los conductores para obtener y renovar su permiso de conducir. Diciembre de 2008.
40 Solicitar la realización de la pruebas para la obtención del permiso de conducir y consultar los resultados de dichas pruebas a través de Internet. Diciembre de 2008.
41. Posibilidad de realizar el pago de sanciones de tráfico a través de Internet, teléfono móvil y teléfono fijo. Julio de 2009.
42. Posibilidad de emitir la tarjeta de la Inspección Técnica de Vehículos en formato electrónico. Diciembre de 2008.

Precisamente cuando leía la relativa al futuro pago de multas por internet, móvil o fijo me acordaba de una anécdota que me ocurrió hace unos días y que muestra lo mucho que nos queda por mejorar en este aspecto.

A la vuelta de las vacaciones de verano me encuentro en mi domicilio un aviso de Correos sobre una notificación de la DGT; acudo a la oficina y el certificado ya se ha devuelto al organismo emisor por haber transcurrido el plazo límite por lo que no me queda más remedio que acudir a sus oficinas para conocer de qué se trata. Tras las respectivas colas (mal endémico de difícil solución) accedo al área de sanciones en la que me comunican finalmente que se trata de una multa por exceso de velocidad captada por un radar fijo y procesada por el Centro de Tratamiento Automatizado de Denuncias. Ahora viene lo bueno: el funcionario me informa que para que comience el correspondiente procedimiento sancionador se debe identificar la persona que conducía en el momento de la infracción. Y esa identificación se debe producir por escrito, bien rellenando un espacio en la notificación inicial (a la que no tuve acceso por encontrarme ausente) o en su defecto haciendo un escrito y mandándolo al citado Centro de Tratamiento Automatizado de Denuncias.

Conclusión: para poder ser sancionado uno tiene que molestarse en hacer primero una declaración y luego desplazarse a una ventanilla administrativa a registrarla. Si no lo hace podría incurrir en infracción muy grave con multa de 301 a 1500€. ¿Todo el mundo sabe cómo hacer estas declaraciones? ¿Se dispone de tiempo para ello y para luego acudir a registrarla? Verdaderamente en este asunto la Administración facilita poco las cosas a los ciudadanos; entiendo que lo más normal es que se ésta la que identifique de alguna forma o, si es complicado , facilitar lo máximo posible las cosas al ciudadano permitiendo por lo menos el uso de medios telemáticos (por ejemplo, respondiendo a un sms).

Se trata, en definitiva, de lo que hemos hablado muchas veces. Intentar evitar trámites a los ciudadanos o darles la opción de que los hagan de una manera muy sencilla. En Tráfico se va en una buena dirección pero todavía falta por mejorar.

1 comentario:

Jose Juan dijo...

Una ayuda puede venir por facilitar al ciudadno a calcular diashabiles
http://www.diashabiles.com