i-public@
reflexiones sobre administración pública inteligente

lunes, 22 de septiembre de 2008

Los valores 2.0 y su correcta utilización


Como muchos de vosotros estoy siguiendo con mucho interés los distintos posts que Alorza viene publicando en su blog Administraciones en Red en relación al fenómeno 2.0, desde el Administración 2.0: no basta con tener un blog, pasando por el modelo OJO de la web 2.0 hasta el último La inmaculada concepción de lo 2.0. También los posts sobre el evento Polítika2.0 que se celebró el pasado fin de semana en el Parlamento Vasco.


De todos ellos he ido sacando distintas algunas ideas que voy a resaltar en este post. Coincido con Alorza que la esencia de este tipo de movimientos está en los valores. Por eso, el otro día le trasladé la sugerencia de mantener el orden jerárquico inicial en el esquema OJO donde el bloque "valores" figuraba en la parte superior. Lo que hace el 2.0 una innovación es precisamente sus valores: conversación, apertura, interrelación, gestión de redes, coproducción, etc. Por supuesto que las herramientas pueden ayudar a transformar los esquemas mentales anclados en viejos modelos, pero lo verdaderamente potente es ser capaz de razonar en base a nuevos valores y, de aquí, aprovechar todo lo que las nuevas herramientas pueden dar de sí. El caso contrario, es decir enfatizar la utilización de una herramienta sin la asunción de valores, desembocará en una infrautilización de la misma.


Lo anterior lo pongo ahora en relación con la masificación de las herramientas 2.0 que también ha mencionado Alorza. Es verdaderamente necesario que el 2.0 sea un fenómeno global que acabe popularizándose y siendo utilizado de forma extensiva. Si se da el caso, las transformaciones sociales, económicas, políticas están a la vuelta de la esquina. Me preocupa que dicha masificación se esté realizando sin asumir los valores 2.0; en ese caso, el efecto puede incluso ser hasta negativo. Lo digo, porque he encontrado últimamente personas que conozco que han empezado a utilizar herramientas 2.0, por ejemplo facebook, con valores 0.0, es decir utilizando perfiles restringidos, limitando sus contactos, creando muros cerrados que excluyen a personas de otras redes, etc. personas que, para más inri, son de actitud mucho más abierta, dinámica y participativa en el mundo real. Desde luego cada uno puede hacer lo que quira y es muy legítimo actuar en ese sentido, pero actitudes de ese tipo contaminan la esencia del modelo. Y, desde luego, a los que apostamos por esto (los early-adopters, pero también sus seguidores) son cosas que nos cuesta mucho entender.


Precisamente este tipo de desviaciones o mala utilización del modelo 2.0 es lo se está dando o puede darse en el ámbito de la política o la Administración. Cuando todo político que se precie abre un blog para las elecciones o lo tiene ahí mantenido por el negro de turno como simple correa de transmisión de las ideas oficialistas de partido; o cuando se implantan herramientas 2.0 en alguna Administración pero sigue estando vigente la cultura del individualismo y del que "la información es poder" no podemos considerar que se esté aprovechando el modelo en su plenitud. Y es muy peligroso, porque pensamos que ya está todo hecho y no es así.


Por ello (y termino) es imprescindible educar a empresas, políticos, funcionarios y particulares en general en los valores 2.0. Bien sea a través de soluciones empresariales como Cink. (empresas y Administración) o a través del boca a boca, los medios de difusión (físicos o virtuales) o simplemente haciendo pedagogía entre amigos, familiares y conocidos. Otra cosa es que nos miren como bichos raros y no nos quieran escuchar.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo estoy más bien con la idea que defiende Alorza en "la inmaculada concepción de lo 2.0". Me parece bueno que se extienda el uso de las herramientas 2.0, porque algo quedará de todo ello.

Por otra parte, la gente (bastante gente) ya sabe distinguir entre los distintos usos que se pueden hacer de la web 2.0. Están los que se lo creen, los que buscan un beneficio legítimo (ojalá cada vez haya más, porque eso significará que la cosa va cuajando) y los que vienen a echarle morro y a manipular. Y a estos el que más y el que menos les ve el plumero.

Todas las herramientas y todos los sistemas son susceptibles de ser usados de diferente manera y con distintos propósitos. Y la web 2.0 no iba a ser una excepción.

Lo bueno de esto es que todos estamos a la distancia de un click y la gente puede comparar. Puede leer lo que más le guste, participar en lo que le interese y sumarse a las causas con las que simpatice.

Es la lógica de la abundancia frente a la de la escasez. Por cierto, ¿has leído "El poder de las redes"? Si no lo has hecho te lo recomiendo.

Odilas dijo...

Estoy contigo.

Masificación y banalación no són lo mismo y no creo del todo en sistemas puramente autoregulados (últimamente menos ;-(

Escribí sobre esto hace unos días http://proyectospersonaspasiones.blogspot.com/2008/09/trampas-20.html

Sergio Cortés dijo...

Efectivamente, el concepto 2.0 democratiza en general las organizaciones y mejora la relación de la administración con el ciudadano... La esperanza es posible, la realidad es viable..

sólo nos queda ponernos a trabajar.

buen post!

Anónimo dijo...

te contesto (demasiado extensamente) en el post "Las invasiones bárbaras"