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reflexiones sobre administración pública inteligente

lunes, 23 de junio de 2008

La política y el tsunami 2.0


Los congresos de los partidos políticos más importantes ocupan el primer plano de la actualidad informativa tras las elecciones. Dejando al margen los contenidos estrictamente políticos, ambas citas presentan pocas novedades en lo que a aspectos formales y organizativos se refiere. De la misma forma, el papel de dichas organizaciones en el sistema político-institucional (incluyendo lo relativo a sus relaciones con la sociedad) parece verse sumido en el mismo proceso estable desde hace décadas. Pero lo cierto es que nos encontramos en un periodo de grandes transformaciones sociales vinculadas a fenómenos como la tecnología, el medio ambiente o los movimientos demográficos. Sin duda, estos factores afectarán a la forma de hacer política. ¿Podrá el modelo político tradicional soportar el tsunami 2.0 que se empieza a sentir en la sociedad? Será difícil.

Sobre el papel, la actividad política consiste en recoger las distintas necesidades sociales, conciliar intereses contrapuestos y encontrar soluciones satisfactorias para el interés general. Por tanto, la cercanía a la sociedad es imprescindible. Tradicionalmente esta cercanía se ha venido materializando en una estructura cercana físicamente a ciudadanos (grupos sociales) que ejercen su acción directamente o a través de los medios de comunicación. La cuestión cambia cuando parte de la sociedad empieza a hacerse oir a través de la red. Esta voz 2.0 sobrepasada los cauces tradicionales del mundo "real" porque incluye a elementos individuales que se dejan oir y comienzan a establecer redes a las que se van sumando afines a la causa. Redes de fácil creación, de crecimiento exponencial, y con nexos de unión débiles pero efectivos. Personas que en otros tiempos estarían calladas y alejadas de los cauces de acción política convencionales.

La adaptación a esta situación requiere un replanteamiento radical del papel y funcionamiento de los partidos políticos. Tanto en lo relativo a los sistemas de escucha y conversación con los ciudadanos como en su estructura interna o incluso en su desenvolvimiento en el sistema democrático. Por no hablar de una puesta al día "urgente" en la formación de sus cuadros sobre el concepto 2.0 y sus herramientas. La simple utilización de algunas de ellas como youtube o los blogs no es suficiente. Estaríamos hablando de pensar y actuar en clave 2.0: co-producción de ideas, participación en debates virtuales, comunicación al minuto de la actividad desarrollada (incluyendo la rendición de cuentas), o acceso de la (ciber)militancia al proceso de elección de dirigentes. Por dar unos ejemplos.

Sin duda, todo ello supondrá una aportación muy saludable a nuestro sistema político. Redundará en más transparencia y más democracia; o ayudará a que la política se viera de una forma más cercana a los ciudadanos. El tsunami 2.0 llegará y será inevitable.



2 comentarios:

gustavo dijo...

Estimado Cortés: Hace minutos publiqué un post en esta misma dirección. Creo que como bien dice el tuyo, tienes razón en que será dificil. Lo que existe ahora mismo es indecisión, parálisis y estupor.

Saludos y nos leemos como siempre.

Gustablog

Anónimo dijo...

En la política, de momento, más que un tsunami, creo que hay unas pequeñas olas que comienzan a llegar a la playa.

Es interesante el post que ha publicado Alain Jorda en su blog sobre la reflexión que han tenido en el PSC sobre el uso de las herramientas de la web 2.0.

En Cataluña es donde más en serio se están tomando este fenómeno. Es donde más políticos tienen blog (no sólo en periodo electoral) e, incluso, en la web del Parlament hay un directorio de parlamentarios catalanes con blog.

Llegará el tsunami y, mientras tanto, no vendrá mal experimentar para que nos (les) coja preparados.