El pasado viernes el Consejo de Ministros aprobaba un nuevo Plan de Austeridad para el periodo 2011-13 que se verá complementado por un Plan de Acción Inmediata para este año 2010.
Las cuentas públicas lógicamente están notando el efecto de la crisis y hay que dar señales a los mercados de que algo se va a hacer para atajar el desbocado déficit. Supongo que esta es la verdadera razón por la que el viernes salió a la palestra la vicepresidenta económica para anunciar (nada más y nada menos) que un tijeretazo de 50.000 millones en los próximos años. No es la primera medida de recorte que se ha anunciado en los últimos tiempos (aquí y aquí) pero sí la más contundente, si es que al final de verdad se va a aplicar.
Para empezar, según la nota oficial de Moncloa, los ministerios tienen que decir en qué van a recortar este año hasta llegar a un 0.5% del PIB (unos 1300 millones de euros). Además, la tasa de reposición de efectivos en la AGE quedará limitada al 10% (sólo una reposición por cada diez jubilaciones), incumpliendo (y no ha hecho más que ponerse en marcha) el acuerdo gobierno-sindiatos del pasado otoño que fijaba esta tasa en el 30% (¿qué dirán a esto los sindicatos de función pública?).
Pero esto es chocolate del loro si comparamos los drásticos ajustes que se anuncian para el periodo 2011-13. Recortar un 2.6% adicional (AGE) va a suponer reestructuraciones del gasto importantes en capítulos como personal, inversiones y transferencias. No sabemos si de nuevo se incumplirá el acuerdo Gobierno-sindicatos (preveía el mantenimiento del poder adquisitivo de los empleados públicos mediante claúsulas de revisión salarial en este periodo) o habrá reducciones de efectivos en la AGE suficientes para alcanzar -0.3% prometido. Si las inversiones públicas se difererirán tanto que afectarán a programas significativos de obras públicas como la red de carreteras o la alta velocidad (-0,5%) . O cómo se verán afectados entes autónomos, CCAA y EELL por la reducción en las transferencias (-1.6%).
Aquí podéis consultar la presentación que hizo la vicepresidente el pasado viernes. Corren tiempos difíciles...
Sobre tijeretazos, es interesante el artículo de Paul Krugman ayer en "El País".
ResponderEliminarhttp://tinyurl.com/ybpj7rn
Se refiere a los USA, pero es claramente extrapolable a cualquier país.